Monitoreo de Aplicaciones en Instalaciones Locales 🖥️
En la era actual, muchas empresas y profesionales ya son nativos de la nube, por lo que puede ser fácil olvidar que algunas aplicaciones aún se ejecutan en las instalaciones locales. Estas siguen siendo de suma importancia para la operación, por lo que es vital administrar su rendimiento, tal como lo hacemos con aquellas aplicaciones que se ejecutan en la nube.
Con esa realidad en mente, en este artículo te presentamos una aproximación para abordar el monitoreo del rendimiento de aplicaciones en instalaciones locales, como parte de una estrategia más amplia de optimización del rendimiento de las aplicaciones en la nube.
Por qué el monitoreo local es diferente
En muchos sentidos, la supervisión y la gestión del rendimiento son las mismas independientemente de dónde se alojen sus aplicaciones. Un registro sigue siendo un registro y un seguimiento sigue siendo un seguimiento, sin importar donde la aplicación se ejecuta. En ambos casos, estás trabajando con los mismos tipos de fuentes de datos y las mismas métricas generales.
No obstante, existen algunas diferencias críticas entre las aplicaciones locales y las aplicaciones basadas en la nube que tienen ramificaciones importantes para las estrategias de monitoreo:
- Implementación
Con las aplicaciones locales, normalmente tienes control total sobre el entorno de alojamiento. Esto facilita la implementación de las herramientas de monitoreo de muchas maneras, ya que puedes instalar un agente donde y como lo necesites para ejecutarse dentro de ese entorno local. Sin embargo, también puede ser más complicado de lo que sería en un servicio en la nube, donde el servicio envía automáticamente datos a una herramienta de monitoreo. - Resiliencia y recuperación
En la nube es fácil replicar cargas de trabajo en diferentes centros de datos o regiones, o activar un entorno de respaldo cuando falla su entorno de producción. Por lo general, esto no se puede hacer en las instalaciones locales, donde solo tienes un entorno para trabajar.
La falta de este tipo de soluciones de conmutación en las instalaciones locales lleva a una mayor necesidad de detectar problemas de forma temprana, con el fin de evitar interrupciones críticas. - Utilización de recursos
Podría decirse que el monitoreo para revelar la utilización de recursos es menos importante en las instalaciones que en la nube. Aún así, debieras recopilar datos que muestren si tus aplicaciones locales están sobredimensionadas. - Arquitectura y servicios de aplicaciones
La arquitectura de las aplicaciones locales tiende a ser más simple que las de la nube. Aunque ciertamente es posible ejecutar instancias como contenedores y funciones sin servidor en las instalaciones, es menos común que en la nube. Es más probable que tu software local consista en aplicaciones heredadas que se ejecutan en máquinas virtuales y utilicen almacenamiento en bloque directo y bases de datos relacionales.
Mejores prácticas para monitorear aplicaciones locales
Hay una variedad de pasos que puedes seguir para crear una estrategia de monitoreo que funcione para tus aplicaciones locales, incluso si también estás administrando el rendimiento de otras aplicaciones que se ejecutan en la nube.
- Utiliza herramientas de gestión del rendimiento que sean compatibles con las instalaciones y la nube
La mejor práctica es usar herramientas de administración de desempeño y monitoreo que funcionen con aplicaciones locales y basadas en la nube. Esto requiere diversificar las herramientas de monitoreo que se usan normalmente en la nube pública (como CloudWatch) que solo funcionan en la nube. Se requiere de soluciones de terceros que pueden capturar datos de cualquier tipo de entorno y que brinden más flexibilidad para crear una estrategia de gestión del rendimiento de un extremo a otro. - Usa el monitoreo sintético para detectar problemas antes
Es especialmente importante en el caso de las aplicaciones locales que puedas detectar problemas de rendimiento al principio del ciclo de desarrollo. Por lo que se recomienda usar el monitoreo sintético, el cual te permitirá probar el rendimiento de la aplicación incluso antes de ser implementada.
También deberías monitorear las transacciones de usuarios reales en producción, ante lo cual, el monitoreo sintético puede proporcionar advertencias tempranas para garantizar que se eviten fallas catastróficas de aplicaciones. Siendo estas últimas más difíciles de resolver en las instalaciones que en la nube. - Supervisar la infraestructura y el software
Debido a que las aplicaciones locales brindan control total y, por lo tanto, visibilidad total de su entorno de alojamiento, no hay límites en la cantidad de datos que se pueden recopilar. Aprovecha esto y monitorea, correlaciona y analiza todas las métricas disponibles de servidores físicos, máquinas virtuales y aplicaciones individuales. Esta información sumará un gran valor a tu negocio. - No te olvides de la Red
Puede ser fácil pasar por alto la importancia del monitoreo de la red, especialmente si acostumbras a trabajar con entornos en la nube donde el proveedor de administra la red por ti. Sin embargo, para las aplicaciones locales los problemas de red pueden provocar rápidamente fallas en la aplicación. Recuerda extraer datos de los dispositivos de red y analizarlos junto con otras fuentes de datos para lograr el mayor nivel posible de visibilidad de tus aplicaciones locales.
Conclusión
Aunque la optimización del rendimiento es similar en algunos aspectos en ambos contextos, la gestión del rendimiento de las aplicaciones locales tiene algunos requisitos especiales.
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